martes, 19 de marzo de 2013

La Guardia Civil alerta del robo de más de 3.500 kg de metales

La Guardia Civil mediante la puesta en marcha de un Plan Nacional contra el robo de metales ha logrado recuperar más de 3.500 kg de metales, principalmente cobre.
En la última actuación llevada a cabo la semana pasada, los agentes inspeccionaron más de 800 chatarrerías recuperando 3,5 Tm de metales presuntamente robados, se ha detenido a 10 personas, han sido imputadas otras 50 y se han impuesto 140 denuncias.
Alertan de que la sustracción de cobre se ha disparado debido a la crisis, por el alto valor que alcanza en el mercado negro.
En 2012, se detuvieron en Avilés a 34 personas por el robo de 145 Tm de escoria en la factoría de Arcelor Mittal de Tabaza, 16 fueron imputadas por el mismo delito y otras 2 por la recepción del metal.
La Guardia Civil está especialmente preocupada por el robo de cables eléctricos o de metales de infraestructuras críticas para el país, por lo que está permanente en contacto con empresas de los sectores de la comunicación, energético y ferroviario o Telefónica.
Igualmente se vigilan las sustracciones de cobre en viviendas en construcción, o los robos de material en huertos solares, centros de transformación y pequeñas centrales eléctricas, que generalmente se encuentran aisladas y por tanto poco vigiladas.
Según explicaba el comandante de la Guardia Civil,
Jesús Gayoso, el ladrón vende la tonelada de metal a 1.500 €, el receptor la pone en el mercado legal a 3.000 € y el distribuidor recibe por ella entre 5.000 y 6.000 €.
Uno de los principales problemas con los que se enfrentan los investigadores es que el cable no está identificado por lo que no se puede conocer su procedencia.
Tras el robo del material, los delincuentes lo venden al receptador que, para evitar que el cable sea identificado, lo pela y lo funde antes de que pase a manos de un intermediario, que en muchos casos desconoce la procedencia ilegal del producto. El cobre ya ha sido blanqueado en este proceso y el distribuidor lo envía, ya legal, a Alemania, China e India, fundamentalmente.
Según el comandante, la colaboración ciudadana y la prevención son fundamentales, y resalta la necesidad de concienciar a los compradores para que no adquieran cobre robado y graben los movimientos de metales en el aplicativo telemático que comparte la Guardia Civil con los centros de residuos sólidos.

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